lunes, 11 de julio de 2016

EL SACO DE PLUMAS


El Saco de Plumas.



Había una vez un hombre que calumnió grandemente a un amigo suyo, todo por la envidia que le tuvo al ver el éxito que este había alcanzado.
 
Tiempo después se arrepintió de la ruina que trajo con sus calumnias a ese amigo, y visitó a un hombre muy sabio a quien le dijo:
"Quiero arreglar todo el mal que hice a mi amigo. ¿Cómo puedo hacerlo?",
a lo que el hombre respondió: "Toma un saco lleno de plumas ligeras y pequeñas y suelta una donde vayas".

El hombre muy contento por aquello tan fácil tomó el saco lleno de plumas y al cabo de un día las había soltado todas. 
Volvió donde el sabio y le dijo: "Ya he terminado", 
a lo que el sabio contestó: "Esa es la parte más fácil.
Ahora debes volver a llenar el saco con las mismas plumas que soltaste.
Sal a la calle y búscalas". 
El hombre se sintió muy triste, pues sabía lo que eso significaba y no pudo juntar casi ninguna.

Al volver, el hombre sabio le dijo:
"Así como no pudiste juntar de nuevo las plumas que volaron con el viento, así mismo el mal que hiciste voló de boca en boca y el daño ya está hecho. Lo único que puedes hacer es pedirle perdón a tu amigo, pues no hay forma de revertir lo que hiciste".

"Cometer errores es de humanos y de sabios pedir perdón".

SAN BENITO DE NURSIA, 11 DE JULIO


Benito de Nursia, Santo
Memoria litúrgica, 11 de julio 


Por: n/a | Fuente: Corazones.org 



Abad, Patrón de Europa
y Patriarca del monasticismo occidental

Martirologio Romano: Fiesta de san Benito, abad, patrono principal de Europa, que, nacido en Norcia, en la región de Umbria, pero educado en Roma, abrazó luego la vida eremítica en la región de Subiaco, donde pronto se vio rodeado de muchos discípulos. Pasado un tiempo, se trasladó a Casino, donde fundó el célebre monasterio y escribió una Regla, que se propagó de tal modo por todas partes que por ella ha merecido ser llamado «Patriarca de los monjes de Occidente». Murió, según la tradición, el veintiuno de marzo. ( 547)
Patronazgo: Patrón de Occidente, de Europa, de los maestros y los escolares, de los caldereros, mineros, espeólogos, de los moribundos, contra la fiebre, las inflamaciones, envenenamientos, los cólicos y contra la hechicería.
Iconograffía: Se lo presenta como abad, con hábito benedictino, con vaso (con serpiente), cuervo, el libro de la regla.
Breve Biografía

Benito de Nursia, conocido como San Benito, nació en (Nursia, cerca de la ciudad italiana de Spoleto, 480 – Montecasino, 547), fundó la orden de los benedictinos y es considerado patrón de Europa y patriarca del monaquismo occidental. Benito escribió una Regla para sus monjes que fue llamada "La Santa Regla" y que ha sido inspiración para los reglamentos de muchas otras comunidades religiosas.

Su hermana gemela, Escolástica, también alcanzó la santidad.

Después de haber recibido en Roma una adecuada formación, estudiando la retórica y la filosofía.

Se retiró de la ciudad a Enfide (la actual Affile), para dedicarse al estudio y practicar una vida de rigurosa disciplina ascética. No satisfecho de esa relativa soledad, a los 20 años se fue al monte Subiaco bajo la guía de un ermitaño y viviendo en una cueva.

Tres años después se fue con los monjes de Vicovaro. No duró allí mucho ya que lo eligieron prior pero después trataron de envenenarlo por la disciplina que les exigía.

Con un grupo de jóvenes, entre ellos Plácido y Mauro, fundo su primer monasterio en en la montaña de Cassino en 529 y escribió la Regla, cuya difusión le valió el título de patriarca del monaquismo occidental. Fundó numerosos monasterios, centros de formación y cultura capaces de propagar la fe en tiempos de crisis.

Vida de oración disciplina y trabajo

Se levantaba a las dos de la madrugada a rezar los salmos. Pasaba horas rezando y meditando. Hacia también horas de trabajo manual, imitando a Jesucristo. Veía el trabajo como algo honroso. Su dieta era vegetariana y ayunaba diariamente, sin comer nada hasta la tarde. Recibía a muchos para dirección espiritual. Algunas veces acudía a los pueblos con sus monjes a predicar. Era famoso por su trato amable con todos.

Su gran amor y su fuerza fueron la Santa Cruz con la que hizo muchos milagros. Fue un poderoso exorcista. Este don para someter a los espíritus malignos lo ejerció utilizando como sacramental la famosa Cruz de San Benito.

San Benito predijo el día de su propia muerte, que ocurrió el 21 de marzo del 547, pocos días después de la muerte de su hermana, santa Escolástica. Desde finales del siglo VIII muchos lugares comenzaron a celebrar su fiesta el 11 de julio.



La medalla de San Benito

La medalla de San Benito es un sacramental reconocido por la Iglesia con gran poder de exorcismo. Como todo sacramental, su poder está no en si misma sino en Cristo quien lo otorga a la Iglesia y por la fervorosa disposición de quién usa la medalla.

Descripción de la medalla:


Medalla de San BenitoEn el frente de la medalla aparece San Benito con la Cruz en una mano y el libro de las Reglas en la otra mano, con la oración: "A la hora de nuestra muerte seamos protegidos por su presencia". (Oración de la Buena Muerte).

El reverso muestra la cruz de San Benito con las letras:

C.S.P.B.: "Santa Cruz del Padre Benito"
C.S.S.M.L. : "La santa Cruz sea mi luz" (crucero vertical de la cruz)
N.D.S.M.D.: "y que el Dragón no sea mi guía." (crucero horizontal)

En círculo, comenzando por arriba hacia la derecha:
V.R.S. : "Abajo contigo Satanás"
N.S.M.V. : "para de atraerme con tus mentiras"
S.M.Q.L. : "Venenosa es tu carnada"
I.V.B. : "Trágatela tu mismo".
PAX : "Paz"
ORACIÓN PARA PEDIR SU PROTECCIÓN
Santísimo confesor del Señor;
Padre y jefe de los monjes,
interceded por nuestra santidad,
por nuestra salud del alma, cuerpo y mente.

Destierra de nuestra vida,
de nuestra casa,
las asechanzas del maligno espíritu.
Líbranos de funestas herejías,
de malas lenguas y hechicerías.

Pídele al Señor,
remedie nuestras necesidades
espirituales y corporales.
Pídele también por el progreso de la santa Iglesia Católica;
y porque mi alma no muera en pecado mortal,
para que así confiado en Tu poderosa intercesión,
pueda algún día en el cielo,
cantar las eternas alabanzas.
Amén.

Jesús, María y José os amo, salvad vidas, naciones y almas.

Rezar tres Padrenuestros, Avemarías y Glorias.
Ésta y muchas oraciones las encontrarán en
DEVOCIONARIO CATOLICO

ORACIÓN A SAN BENITO DE NURSIA O ABAD PARA PEDIR SU INTERCESIÓN

Oración a San Benito para pedir su interseción


Santísimo confesor del Señor; Padre y jefe de los monjes, interceded por nuestra santidad, por nuestra salud del alma, cuerpo y mente.

Destierra de nuestra vida, de nuestra casa, las asechanzas del maligno espíritu. Líbranos de funestas herejías, de malas lenguas y hechicerías.

Pídele al Señor, remedie nuestras necesidades espirituales, y corporales. Pídele también por el progreso de la santa Iglesia Católica; y porque mi alma no muera en pecado mortal, para que así confiado en Tu poderosa intercesión, pueda algún día en el cielo, cantar las eternas alabanzas. Amén.

Jesús, María y José os amo, salvad vidas, naciones y almas.

Rezar tres Padrenuestros, Avemarías y Glorias.

DECÁLOGO PARA VACACIONES


Decálogo para vacaciones
El descanso será siempre una hermosa invitación a nuevos descubrimientos,tiempo de recuperar fuerzas, ensanchar horizontes, enriquecer criterios, iluminar caminos 


Por: Antonio Gil | Fuente: Religión en Libertad 



Llega el descanso, procurando encontrar ese "lugar tranquilo", al que Jesús invitaba a sus discípulos en el Evangelio. Tiempo de recuperar fuerzas, ensanchar horizontes, enriquecer criterios, iluminar caminos. Tiempo para la oración más prolongada, para los encuentros más hermosos.

A vuela pluma, dejamos aqui este Decálogo para vacaciones, que bien pudiera servirnos de pauta para aprovechar más y mejor nuestro tiempo de descanso. Porque el descanso será siempre una hermosa invitación a nuevos descubrimientos, cerca o lejos de nosotros. Pero eso sí, sin olvidarnos de lo que es esencial, de ese alimento que nos hace avanzar con vida cada jornada.

1. Saluda el nuevo día con un ofrecimiento de obras, que te haga emprender la jornada con ilusión y optimismo.

2. Busca enseguida un hueco para la oración, a ser posible, ante el Sagrario de cualquier iglesia recoleta. Una oración que lleve el sello de "encuentro con el Señor", escuchando el rumor de sus palabras, la cercanía de su presencia, las mociones que, a buen seguro, alentará en el alma.

3. Dedica unas horas a un trabajo que comporte servicio y entrega a los demás. Descansar nos alejarnos del prójimo sino, olvidándonos incluso de los más cercanos. Todo lo contrario: hay que buscarles más, atenderles mejor, escucharles, comprenderles, amarles.

4. No te olvides de esos libros que tienes pendientes de leer: ensayos, biografías, novelas, historia... Toma buena nota de lo que lees, de lo que descubres, de lo que te ha impresionado más, de lo que te gustaría incorporar a tu vida.

5. Pasea plácidamente por los paisajes que más te gusten: playas, veredas, descampados... Contempla y saborea la naturaleza.

6. Mira el firmamento a distintas horas del dia y de la noche... A veces, pasa mucho tiempo sin que hayamos visto una estrella o la belleza incomparable de la luna llena, o la salida del sol en el horizonte...

7. Disfruta más de la familia, porque el descanso ofrece nuevas oportunidades para conocernos todos mejor, para saber lo que necesitamos y hasta lo que nos sobra en ocasiones.

8. Descubre nuevas amistades, -el verdadero amigo siempre es un gran tesoro-, que nos ilusionen, nos hagan reír y pensar, nos acompañen, nos entusiasmen.

9. Siembra gestos hermosos, obras de caridad, ayudas anónimas, no sólo con un donativo sino también con una palabra amable, con una sonrisa, con una orientación para emprender rutas nuevas.

10. Vuelve mejor de todos los descansos, más sereno, más dispuesto a caminar, más alegre, más generoso. Porque el descanso no es cruzarse de brazos sino abrirlos de par en par a Dios, a su obra creada, a nuestros hermanos...

ORACIÓN A SAN MIGUEL ARCÁNGEL


miércoles, 6 de julio de 2016

COMPARTE TUS DONES


Comparte tus dones



Existe una inmensa alegría en poder alegrar a otros a pesar de nuestra propia situación. La aflicción compartida disminuye la tristeza, pero cuando la alegría es compartida, se duplica. Si deseas sentirte feliz y realizado, basta compartir tus bendiciones, especialmente ésas que no se pueden comprar con dinero.

Si tienes un regalo, no lo ocultes. Si tienes una canción, cántala. Si tienes talento, ejercítalo. Si tienes amor, bríndalo. Si tienes tristeza, sopórtala. Si tienes felicidad, compártela. Si tienes religión, vive y obra según ella. Si tienes una oración, dila a los cielos. Si tienes una palabra dulce, no la retengas. Porque: todos tenemos regalos que podemos dar. Todos tenemos canciones que podemos cantar. Todos tenemos palabras melodiosas que podemos decir. Todos tenemos plegarias que podemos orar. Todos tenemos amor y alegría que podemos dar. Todos tenemos una vida feliz por vivir. Repartamos por el mundo lo que Dios nos dio para compartirlo generosamente.

Antes de buscar el beneficio personal, pregúntate, ¿qué puedo compartir hoy? En lugar de querer poseer empezarás a donar, guiado por el deseo de ayudar a satisfacer las necesidades de los otros. Cada uno tiene algo para compartir. Dinero, talento, tiempo o una simple oración. La generosidad nos pone en sintonía con nuestra semejanza divina. Ánimo, inténtalo.


* Enviado por el P. Natalio

IMÁGENES DE SANTA MARÍA GORETTI